La vida moderna implica moverse aceleradamente y cumplir de forma simultánea con responsabilidades laborales y familiares, todo en un marco de bullicio y congestión vehicular que presentan las grandes ciudades, por lo cual cada vez es menos el tiempo libre que tenemos. 

Llevar una vida convulsionada genera estrés y reduce nuestros momentos de felicidad por eso resulta muy importante buscar las herramientas que nos permitan frenar la ansiedad y poder encontrar el equilibrio que tanto necesitamos. Recordemos que llevar al extremo el cumplimiento de nuestras responsabilidades diarias puede afectarnos emocionalmente, por lo cual resulta conveniente saber aplicar técnicas de relajación para reducir el estrés y la ansiedad, para superar los momentos difíciles. Si estás decidida a comenzar a incorporar técnicas de relajación en tu vida diaria, es importante encontrar un espacio solo para ti, para ello hay que olvidarse de los chats del teléfono móvil, de la agenda de trabajo o de lo que falta comprar para abastecer la alacena de casa. Ya habrá tiempo luego para resolver el resto de las cosas, pues ese debe ser tu momento y por ello se merece toda tu atención, a fin de sacarle el máximo beneficio. El objetivo es poder relajarse desde un punto de vista mental, pero también físico. Son varias las técnicas de relajación existentes, algunas de ellas pueden ser realizadas en casa sin ayuda, mientras que otras requieren la mano de un profesional. También están aquellas basadas en el ejercicio físico e incluso otras novedades como escuchar música clásica o el empleo de la risa como terapia. A continuación los cuatro pasos más importantes, que puedes poner en práctica de forma inmediata:

1. Respiración Si empiezas a notarte acelerada y te encuentras en su sitio público, lo más recomendable es intentar estabilizar el pulso cardiaco, devolviéndolo a sus niveles de equilibrio, para ello es necesario apoyarse en la respiración.

Los pasos a seguir son:

• Colocarse en una posición cómoda, bien sea de pies o sentada y situar una mano sobre el pecho y la otra sobre el abdomen.
• Luego se debe tomar aire de forma suave por la nariz, esto nunca debe hacerse por la boca, allí notarás cómo el pecho se llena y después se desinfla. Tras este paso, se repite la toma de aire desde la nariz pero dirigiéndolo hacia el abdomen, hasta que el estómago se vacíe.

2. Mindfulness o Atención Plena Esta no solo es una técnica de relajación sino también una filosofía de vida para tomar conciencia plena de quiénes somos y trabajar sobre nuestra personalidad.

Estas son algunas de las técnicas que involucra:

• La respiración: Esta se aplica acostado en una superficie cómoda y consiste en respirar conscientemente, prestando atención a la forma como ingresa el aire por la nariz, cómo se llena el estómago y finalmente cómo éste se va vaciando poco a poco.
• Observar el pensamiento: Consiste en prestar atención a aquello que está anclado a nuestra cabeza, que puede ser algo negativo pero no debe rechazarse, sino mas bien identificar de dónde viene ese pensamiento y qué sensaciones son las que produce.

Una vez identificados, viene el momento de dejarlos ir ya que no vale tenerlos almacenados en nuestra mente.

• Identificar emociones: Debemos saber que los pensamientos provocan emociones y muchas veces tratamos de luchar contra ellas, pero en lugar de combatirlas es más recomendable aceptarlas.

Por ejemplo la felicidad es mucho más sencilla de asimilar que la tristeza, aunque la segunda no puede calificarse como netamente mala, pues es una emoción con la que en ocasiones corresponde vivir, asumiéndola llegará luego la etapa en que esta cambiará por una nueva emoción.

3. Visualización Una vez controlada la respiración corresponde iniciar una imaginación guiada, la cual consiste en utilizar la mente para visualizarse en situaciones negativas o positivas. Generalmente las personas tienden a imaginar lo negativo, consiguiendo sufrir a través del pensamiento. Esa energía empleada en pensamientos negativos, debe ser reorientada para imaginarse en momentos positivos. Para lograrlo aquí detallamos algunas recomendaciones:

• Ubicarse en un lugar lejos del ruido y sin mucha luz, opcionalmente acompañar el momento con música relajante a bajo volumen bajo.
• Se deben cerrar los ojos y pensar en un paisaje natural, como un cielo azul, el oleaje del mar, un jardín lleno de flores y cualquier otra imagen que genere paz. Respira e imagina estar allí, el resultado será que tu mente se llenará de paz y de tranquilidad.
• Durante el proceso debe controlarse la respiración y de a poco de deben mover los músculos a estirar, luego se abren los ojos permaneciendo acostado, recuerda que no hay prisa en este momento, la idea es quedarse con ese buen recuerdo.

4. Meditación Esta es una herramienta que permite entrenar la mente para combatir la ansiedad o la depresión. Para ponerla en práctica lo más recomendable es tomar una postura de pie o sentado, con la espalda recta y la cabeza alineada con la columna vertebral. La meditación va muy unida a realizar una respiración consciente, acompañando el proceso de inhalar y exhalar con frases como "me relajo" o "me calmo", lo cual ayudará en ese momento de relajación, evitando que otro tipo de pensamientos negativos interfieran.

Siguiendo estos consejos veremos como si bien los problemas seguirán allí, sabrás como afrontarlos, pero manteniendo la calma y aprovechando la sabiduría alcanzada durante cada proceso, teniendo como resultado vidas mas plenas y felices.